Delegados reunidos en República Dominicana acordaron diseñar acciones para construir una nueva cultura tecnológica, científica y digital orientada a las niñas y mujeres. (18 de octubre, 2013) Los representantes de los Estados miembros y asociados de la CEPAL que participaron esta semana en la XII Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe se comprometieron a trabajar para que la sociedad de la información y del conocimiento fomente la autonomía económica de las mujeres y su plena participación, en condiciones de igualdad, en todas las esferas de la sociedad y en todos los procesos de toma de decisiones.
Este compromiso es parte del Consenso de Santo Domingo aprobado hoy en la clausura de la cita intergubernamental organizada por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y el Gobierno de República Dominicana, a la que asistieron autoridades, funcionarios internacionales, especialistas y representantes de la sociedad civil de la región.
El encuentro se centró en la relación entre la autonomía económica y los derechos de las mujeres, especialmente en el marco de la economía digital. Por ello el Consenso establece una serie de medidas relacionadas con el rol de las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) en la igualdad de género y en la autonomía de las mujeres en sus diferentes dimensiones. También aborda los derechos sexuales y reproductivos, la eliminación de la violencia, la participación política y la toma de decisiones, entre otros temas.
Junto con ratificar los compromisos asumidos por los países en diversos acuerdos internacionales, los países acordaron “diseñar acciones para la construcción de una nueva cultura tecnológica, científica y digital orientada a las niñas y las mujeres” y “potenciar la inclusión de la perspectiva de género como eje transversal de las políticas públicas de desarrollo productivo”.
Asimismo convinieron fomentar medidas legislativas y educativas para erradicar y penalizar contenidos sexistas, estereotipados, discriminatorios y racistas en los medios de comunicación, software y juegos electrónicos. A esto se suma el apoyo dado al uso de las TIC y las redes sociales como recursos para prevenir la violencia contra las mujeres y mejorar la eficiencia y la calidad de los servicios de salud.
En el Consenso los delegados acordaron promover el acceso de las mujeres al empleo, redistribuyendo las tareas de cuidado entre el Estado, el mercado y la sociedad y facilitando la capacitación y el uso de la tecnología, el autoempleo y la creación de empresas en el sector científico-tecnológico. También buscan aumentar la proporción de mujeres en áreas en que se encuentran infrarrepresentadas, como los ámbitos académico, científico, tecnológico y de las TIC.
Los representantes de los países reconocieron la importancia del trabajo doméstico no remunerado, planteando la necesidad de realizar cuentas satélites de trabajo no remunerado en el sistema de cuentas nacionales para mejorar las políticas de igualdad.
En el Consenso el cuidado se reconoce como un derecho de las personas y, por lo tanto, una responsabilidad que debe ser compartida por hombres y mujeres de todos los sectores de la sociedad, las familias, las empresas y el Estado. Esto implica adoptar medidas, políticas y programas de cuidado y de promoción de la corresponsabilidad en la vida familiar, laboral y social que liberen tiempo para que las mujeres puedan incorporarse al empleo, al estudio y a la política, y disfrutar plenamente de su autonomía.
En otro punto, los países se comprometieron a desarrollar políticas activas referidas al mercado laboral y al empleo productivo que aseguren trabajo decente para todas las mujeres, combatiendo las condiciones de precariedad e informalidad que afectan principalmente a la fuerza laboral femenina y garantizando igual salario por trabajo de igual valor, una tasa de participación igualitaria, la presencia sin discriminación en puestos de poder y decisión y la superación de la segregación ocupacional.
Se acordó, asimismo, tomar medidas que permitan el acceso de las mujeres a servicios financieros formales, como el ahorro, el crédito, los seguros y las transferencias, sin ningún tipo de barrera por discriminación y en condiciones de igualdad.
En el Consenso se reconoce el trabajo realizado por el Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe de la CEPAL, en cuanto a formación y creación de capacidades, intercambio y difusión de información y experiencias y visibilización de la situación de las mujeres en la región. Los países se comprometieron a apoyar su labor aportando en esta nueva fase con información económica sobre la situación de las mujeres.
De igual forma, los delegados plantearon desarrollar políticas para hacer realidad los compromisos y metas de la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información y el Plan de Acción sobre la Sociedad de la Información y del Conocimiento para América Latina y el Caribe (eLAC2015) , cuya Secretaría Técnica también es ejercida por la CEPAL. Los países también consideraron necesario promover la incorporación del tema de la igualdad de género y autonomía de las mujeres en la nueva agenda para el desarrollo después de 2015.
Finalmente, en el Consenso se agradece al Gobierno, en especial al Ministerio de la Mujer de República Dominicana, por la eficiente organización de la reunión, y se establece que la XIII Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe se celebrará en Uruguay.
Ver también: PLE_Consenso_de_Santo_Domingo
Fuente: CEPAL