Estimados y estimadas participantes del Foro Político sobre el desarrollo entre la Comisión Europea y América Latina y Caribe:
En estos dos días hemos polemizado, dialogado a veces, sobre temas significativos para las organizaciones de la sociedad civil y los actores locales. Disputar el significado de las palabras, es discutir sus contenidos políticos. Por eso creemos que no debería hablarse de DESARROLLO sin abordar las consecuencias perversas de que la palabra se haya quedado atrapada en una idea de «progreso ilimitado» asociado al consumo sin límites y a la explotación ilimitada, también, de la naturaleza. Como ejemplos más dramáticos podemos citar el desplazamiento de grandes contingentes de personas, principalmente pequeños agricultores, campesinos y pueblos indígenas, debido a la agricultura extensiva y agrotóxica, a grandes obras de infraestructura y a las explotaciones de recursos naturales que alimentan un modelo extractivista.
No deberíamos pronunciar la palabra DESARROLLO sin recordar que las organizaciones y movimientos que resisten a los efectos perversos del modelo, son criminalizadas, sufren de prisión injusta e incluso son asesinadas por defender maneras de vivir que ya no encajan con lo que dominantemente, se entiende como desarrollo. Si entendemos al desarrollo como un crecimiento ilimitado, este es incompatible con el respeto al planeta y al medioambiente. Debemos repensarlo y hacerlo COMPATIBLE con la REDISTRIBUCION. No es posible desarrollo ninguno si algunas pocas personas y empresas concentran cada vez más riquezas sobre la base de la exclusión de las mayorías.
Por lo tanto, el llamado DESARROLLO no puede ser pensado separado de la democracia, de los derechos y la justicia social. El actual modelo es depredador de la naturaleza, refuerza la exclusión, el racismo, la homofobia, la discriminación y los fundamentalismos de todo tipo: los que nostálgicos de la Edad Media creen que en el siglo XXI se puede seguir lapidando a las mujeres, infibulando el clítoris a las niñas, torturando a los homosexuales, y los que haciendo caso omiso a la pobreza que generan, pretenden seguir acumulando riqueza y privilegios a costa de la humanidad entera.
El desarrollo no puede limitarse a la reducción de la pobreza. La justicia y la felicidad deben ser su objetivo, y por eso tiene que abarcar el ámbito productivo y el reproductivo. El trabajo no remunerado y la economía del cuidado, que hoy recaen mayoritariamente sobre las mujeres, debe ser asumido colectivamente. Necesitamos un desarrollo en equilibrio con la naturaleza y centrado en las personas, que entienda e integre sus modos de vivir. En ese sentido saludamos la resolución tomada en el día de ayer por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU (con el voto contrario de EEUU, Corea del Sur, Japón y paradójicamente, la UNION EUROPEA) que plantea la creación de un grupo de trabajo con la finalidad de establecer normas vinculantes que obliguen a las empresas transnacionales a rendir cuentas por sus actividades.
La agenda 2015 debe tener como objetivo la eliminación de las desigualdades estructurales, incluidas las de género, raza, etnia, edad y, por supuesto, las de clase. Debe ser una agenda que garantice los derechos humanos y como parte indisoluble de éstos, los derechos sexuales y los derechos reproductivos. Es impensable cualquier agenda y cualquier desarrollo sin las mujeres. Por eso, desde este espacio, nos gustaría que se pudiera recomendar que las mujeres estuviéramos incluidas, paritariamente, NO SOLO en las discusiones sobre las hojas de ruta sino TAMBIEN en cada uno de los debates y en la toma de decisiones que sobre la agenda post 2015 se lleven a cabo. Y ya que mencioné una recomendación, nos gustaría hacer tres recomendaciones más: que todos los instrumentos europeos se orienten a la definición de los derechos humanos de forma explícita y expresa. fortalecer mecanismos de transparencia y rendición de cuentas y acceso a la información pública.
Ello supone el fortalecimiento de la ciudadanía y sus organizaciones, en su capacidad de contralor de las políticas.asegurar la participación de la sociedad civil en la gobernanza LO QUE INCLUYE fortalecer las redes y articulaciones de las organizaciones y redes, apoyándolas financieramente. SI TANTAS ORGANIZACIONES SE SIGUEN CERRANDO, no habrá demanda organizada y foros como este habrán perdido todo el sentido. Hace dos meses en Naciones Unidas, en ocasión de los 20 años de la conferencia del Cairo, la Declaración de las organizaciones feministas de LAC terminaba planteando el siguiente DESAFÍO: “Estamos aquí para imaginar y hacer realidad aquello que soñamos. Imaginemos un mundo donde la igualdad sea un horizonte posible. Imaginemos sujetos colectivos con capacidad de resistencia y autonomía para definir sus prioridades y proyectos. Imaginemos un mundo con todos los derechos para todas las mujeres, para todas las PERSONAS. Imaginémoslo. Y ahora, hagámoslo.” Esperamos que en esta invitación de la Comisión Europea al Foro Político sobre Desarollo estemos dando un gran paso, un paso real para cumplir con ese desafío.
Lucy Garrido 2014