Sobre el hombre ya pesaba una condena a prisión por golpear a su expareja. Por Facebook, intimidó a la comunicadora y a una funcionaria. En una decisión sin precedentes, lo sancionaron por contravenir el Código de Convivencia. También pesa sobre él una orden de restricción.
Ser periodista, cubrir casos de violencia de género y desempeñarse como activista por los derechos de las mujeres puede conllevar costos importantes; como los que está atravesando Mónica Reviglio en Córdoba, Argentina, quien está siendo hostigada por Alejandro Cerquetti, un agresor condenado por golpear a su expareja.
“Me siento en peligro”, asegura Reviglio, quien jamás había tenido que atravesar situaciones similares. La periodista se desempeña en los Servicios de Radio y Televisión (SRT) de la Universidad Nacional de Córdoba.
Como la conducta del agresor no está tipificada en un delito de mayor gravedad, la Justicia argentina utilizó el Código de Convivencia de la Provincia de Córdoba para sancionar y, a la vez, intentar poner un párate al agresor. Se aplicó el artículo 65 de dicho Código, que prevé sanciones para quienes intimiden, hostiguen o maltraten física, psíquica o económicamente a otra persona, siempre que el hecho no constituya delito, agravado por razones de género.
Sin precedentes
Reviglio, quien integra el Colectivo Ni Una Menos Córdoba, cubrió desde el primer momento el “caso Cerquetti”. El hombre fue condenado en junio de 2016 a un año y dos meses de prisión por golpear a su expareja, luego de que ella publicara fotos con su rostro magullado en enero de 2015.
Desde entonces, Cerquetti hostigó a Reviglio, a otras integrantes del Colectivo Ni Una Menos Córdoba y a una funcionaria del Gobierno de la provincia.
En una decisión sin precedentes, el agresor fue sancionado por la Justicia provincial por utilizar Facebook para insultar y amedrentar. Tendrá que pagar una multa de casi 12.000 pesos argentinos (cerca de 700 dólares) y se le impusieron dos órdenes de restricción: no puede acercarse a Reviglio ni a Claudia Martínez, secretaria de Lucha contra la Violencia.
Sin límites
A pesar de las sanciones, Cerquetti no ha parado de hostigar a la periodista. Ha utilizado distintas herramientas legales y ha enviado cartas documento a varios medios de comunicación, al sindicato de periodistas CISPREN y a la misma Reviglio, donde la intima “a retractarse con respecto a las expresiones injuriosas y calumniosas” supuestamente dirigidas a su persona.
Con anterioridad había utilizado otros artilugios contra su expareja, como solicitar un botón antipánico porque “era amenazado por ella”. La mujer estuvo detenida diez horas por este motivo.
Reacción
Múltiples organismos de derechos humanos, periodísticos, referentes académicos y medios han expresado su apoyo a Reviglio.
Para solidarizarse, comunicarse con Ni Una Menos Córdoba.