Seis activistas feministas argentinas corren riesgo de ser condenadas penalmente por realizar pintadas en el espacio público con el objetivo de convocar al histórico Paro Internacional de Mujeres del último 8 de marzo.
Las activistas están imputadas por el delito de daño simple y agravado por escribir leyendas como “Lesbianas”, “8M” y “Paro” en las paredes de una iglesia y dos bancos en la ciudad de Buenos Aires el 7 de marzo de 2017. Las seis mujeres corren riesgo de obtener una condena penal, ya que el 13 de julio la Justicia negó el pedido de nulidad de la causa.
La Defensa de las activistas acudió a ese recurso por considerar que la detención de las jóvenes -que estuvieron encarceladas durante 12 horas- fue “arbitraria”. Los cuatro militantes católicos que las denunciaron al 911 esa madrugada incurrieron en “falso testimonio” e incluso se hicieron pasar por policías y les dieron la voz de alto mientras las perseguían por la calle. Tal como muestra un video incorporado a la causa, en ese momento llegó un patrullero, informó el diario Página 12.
“Apoyamos a nuestras compañeras en repudio a las acciones de criminalización de la protesta social, disciplinamiento de militantes feministas y empoderamiento de varones patriarcales”, manifestó el colectivo de periodistas Ni Una Menos en su Facebook. Una de las integrantes de esta organización está entre las seis imputadas.