Más de cien organizaciones feministas, sindicales, de mujeres y activistas independientes se unieron para defender juntas sus derechos y marchar contra el capitalismo y el patriarcado, en el trabajo, en la casa, en la calle, en la cama, en los territorios y por la migración.
En conmemoración del Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras y bajo el lema “Trabajadoras sí, explotadas y violentadas no”, se convocaron a diversas actividades que culminaron el 7 de marzo con una marcha en las calles de Lima y movilizaciones similares en diferentes regiones del país.
Las mujeres tomamos las calles para reclamar nuestro derecho a un trabajo y una vida digna, libre de todas las formas de violencia. Compartimos el pronunciamiento que se leyó en la marcha:
¡Trabajadoras, sí! ¡Explotadas y violentadas, no!
Las mujeres estamos en Emergencia Nacional y en contra de la violencia estructural representada por los 29 feminicidios, más de 400 denuncias de violación a menores y las muertes de niñas que enlutan este 2020; nosotras nos enfrentamos a una profunda crisis de cuidados, en el que históricamente hemos resuelto las actividades de cuidado y domésticas no remunerados resultado de cómo el sistema capitalista y heteropatricarcal nos asigna este rol en la sociedad, debilitando los sistemas de protección social, junto con la desregulación laboral y la sistemática privatización de la educación y la salud que termina siendo asumida por los hogares. Las mujeres peruanas trabajamos más de 25 horas a la semana que los hombres en actividades de cuidado, limitando nuestra disponibilidad de tiempo y recursos para insertarnos en el trabajo remunerado. Este trabajo sostiene la vida de nuestra sociedad, representando en términos económicos más del 20% del PBI nacional, y sin embargo es un trabajo precarizado, invisibilizado y poco valorado.
Entre las consecuencias de esta crisis, el 75,1% de nosotras trabajamos en el sector informal que significa una escasa posibilidad de organizarnos o sindicalizarnos, siendo víctimas de políticas persecutorias. En contraparte, se han implantado regímenes laborales especiales para las trabajadoras del hogar, trabajadoras textiles y trabajadoras de la agroindustria, que nos confinan a contratos temporales precarizando nuestro poder de negociación colectiva y derechos laborales y sociales; estigmatizándonos, sin reconocimiento de derechos y siendo víctimas de leyes sancionadoras, como las trabajadoras sexuales.
Las mujeres con discapacidad, que representamos el 5.9% de la población peruana, nos enfrentamos a una cadena de mayor discriminación y acceso limitado a la educación, que nos impide acceder a un empleo digno. Si bien las entidades públicas y privadas tienen obligación de cumplir una cuota laboral, las acciones de fiscalizacion para su cumplimiento son insuficientes y no garantizan las cuotas de género, profundizando las desigualdades.
Aún hoy, las mujeres ganamos 7 soles por cada 10 soles que ganan los hombres, en promedio nacional, brecha que se acentúa en el ámbito rural y regiones con mayores niveles de pobreza. Las brechas salariales, despidos despidos arbitrarios, fraudulentos o nulos; hostigamiento sexual; “feminización” de sectores económicos de baja productividad y regímenes laborales especiales, labores infravaloradas y penalización de la maternidad, son solo algunas formas en las que la discriminación estructural sostiene el funcionamiento del sistema económico.
La expansión neoliberal y extractivista que despoja y contamina las tierras campesinas e indígenas ha significado más violencias para nosotras que trabajamos en el campo, la casa y la comunidad como productoras de alimentos para las ciudades, defensoras de la tierra y en la conservación de ecosistemas, aunque pocas poseemos tierras o las tenemos en extensiones reducidas.
Finalmente, la reproducción de la vida que es una condición fundamental para el funcionamiento del sistema económico social y razón por la que los sistemas legales y religiosos han regido sobre cuándo y cómo debemos traer hijos al mundo, hace imprescindible que luchemos por autonomía para decidir sobre nuestros embarazos, así como, libertad y derechos para relaciones afectivas y formas de familia diversas.
Las mujeres trabajadoras, en nuestra diversidad, de la economía formal e informal así como campesinas; afrodescendientes, indígenas, migrantes, racializadas; con discapacidad, neurodivergentes; lesbianas, trans, bisexuales o no binarias, sostenemos con nuestro trabajo la vida, frente a un sistema de explotación, precarización y criminalización de la protesta social. Por ello, en el contexto de los resultados electorales del #26E que nos presenta un Congreso fragmentado y disperso, de baja representación, sin paridad y dominado por sectores conservadores que amenazan los avances democráticos, nos rebelamos contra todas las violencias, retomando el control de nuestras cuerpas, y EXIGIMOS:
– RESIGNIFICAR el trabajo y reconocer política, social y económicamente, los cuidados y actividades doméstica no remuneradas que resuelven las mujeres en respuesta a la insuficientes políticas públicas de cuidado.
– IMPLEMENTAR una educación con enfoque de género para promover una sociedad en la respetuosa de la igualdad, rechazando toda forma de discriminación y violencias dentro y fuera de las e
– NORMAR e IMPLEMENTAR el Sistema de Cuidados estipulado en la Política Nacional de Igualdad de Género aprobado en el 2018, para democratizar el cuidado entre hombres y mujeres, en que el Estado asuma su responsabilidad, a través de la provisión de servicios específicos, como implementación de guarderías y salas cunas en los lugares de trabajo, centros de atención para las personas adultas mayores y con discapacidad, así como políticas públicas de ampliación de permisos equitativos de maternidad y paternidad, reducción de jornadas, entre otros.
– PROMOVER la #LeySolsiret que obligue a empresas de telecomunicaciones a facilitar las investigaciones y a los medios de comunicación, cumplir protocolos de protección y tratamiento para víctimas de violencia basada en género contra las mujeres.
– IMPLEMENTAR los protocolos para mujeres desaparecidas y ACTIVAR el registro unificado de mujeres desaparecidas.
– DISPONER medidas para prevenir, proteger y atender en forma célere los casos de feminicidio, que hasta febrero 2020 alcanzaron a 29 víctimas.
– RESPONDER a las demandas de paridad, alternancia y sanción al acoso político, que garanticen la representación de las mujeres en los poderes del estado.
– EXIGIMOS la defensa de la libertad de expresión y la seguridad e integridad física de las defensoras de los derechos de las mujeres
– ATENDER con prontitud los juicios por alimentos.
– OTORGAR atención integral a niñas menores de 14 años en situación de embarazo infantil forzado.
– DEBATIR y APROBAR la Ley de Identidad de Género, contemplando el cupo laboral para mujeres trans, reconociendo que es grupo poblacional particularmente vulnerabilizado.
– INCLUIR en toda política pública de promoción de trabajo para personas con discapacidad el enfoque de género que favorezca la educación y cuotas laborales efectivas para mujeres con discapacidad: La discapacidad no es incapacidad.
– DEBATIR y APROBAR la Ley de trabajadoras del hogar, ya que el 96% de trabajadoras del hogar son mujeres.
– DEROGAR la Política Nacional de Competitividad y Productividad Laboral (DS N° 345-2018-EF), Plan Nacional de Competitividad y Productividad (DS Nº 237-2019-EF), la Ley de Exportación No Tradicional (DL 22342), y la Ley de Promoción Agraria (DL 27360).
– ELIMINAR las disposiciones lesivas de derechos colectivos del DU 014-2020 que regula la negociación colectiva en el sector público.
– INCLUIR en planilla a las 709 trabajadoras que son representadas por el Sindicato de Trabajadores de la Empresa Innova Ambiental S. A. SITOBUR.
– ATENDER a los y las trabajadoras del sector retail en su lucha por salarios dignos acordes a las inmensas ganancias de las empresas.
– ATENDER las necesidades de atención en salud para las familias de Cerro de Pasco que se encuentran en grave y urgente situación.
Organizaciones y colectivas:
Abolefem, Acción Por Igualdad, ACIPECS Lima Norte, Agenda Mujeres Perú, Acción Popular, Asamblea de Mujeres y Diversidades, Asociación de Jueces – JUSDEM, Asociación Nacional de Periodistas, Asociación Peruana de Mujeres Juezas, Awqa Feminista, Awqa Warmi Puno, Bloque Universitario Feminista, Corriente Amaru, CAF, Canto a la Vida, CDM – Ciudadanas y ciudadanos del Mundo, CENCUT, Centro AMMAR, Centro Juvenil Futuro Innpares Lima, CGTP MUJER, Católicas por el Derecho a Decidir – Perú, CLADEM Perú, CMP Flora Tristán, COCEMFE, COD- Perú, CODIP – Mujeres invidentes, Colectiva Fugitivas, Colectiva Mujer y Poder, Collera, Comuna Feminista Ventura Ccalamaqui, Conamovidi, Cosades, CUT, DEMUS, Educación e Igualdad, Empoderadxs, En Movimiento, ERSH, Familias Unidas por Justicia, Fenamudip Mujeres PCD, Fenmucarinap PERÚ, Fentrahogarp Lima, FENUTSSA CEN, Foro Juvenil de Izquierda, Frater – Mujeres con discapacidad, Frente Juvenil, Fuerza Ciudadana, Género y discapacidad, IPROFOTH – Trabajadoras del Hogar, Isadora Mujeres en Lucha, Jotacé – Cajamarca, JP Breña, Juntos por el Perú, Kimochi Gestión cultural, Kusqas colectiva feminista, La Junta, Las Insurgentes, Las Karahuayllas, LIFS PERU – lesbianas independientes feministas socialistas, Madres en Acción, Maestras y maestros sin fronteras, Marcha Mundial de las Mujeres, MHOL, MLCM+ (Mujeres viviendo con VIH), MODES, Movimiento de Trabajadoras Sexuales del Perú, Movimiento Manuela Ramos, Movimiento por el Socialismo – Voz Socialista (MS), MUJER UNALM Colectiva Feminista, Mujeres Desaparecidas Perú, Mujeres Liderezas Lima Norte, Mujeres Migrantes Maltratadas, Mujeres y Diversidades FA, MujerValiente Perú, NiUnaMenos Ventanilla, Nuevo Perú, NUM Ate, Paremos el Acoso Callejero, Parió Paula Percusión, Paro Colectiva, Partido Comunista del Perú – Patria Roja, Presencia y Palabra, Mujeres afroperuanas, Rawa Feminista, Red Canillitas online PERU, Ruge Hermana, Se Acabó El Silencio Arte y Diseño – PUCP, Sindicato DIGEMID, Sintrahogarp, Sinttrahol, SITOBUR, Somos la mitad, Somos la mitad queremos paridad, SUTEP, SUTUPCH, Tamboras Resistencia, Tejido Ecofeminista, UPMP, Vayamos SJL, Viernes por el Futuro – Lima Centro, Yemayá batucada.